El Tut-Anj-Amón americano aterriza en España. Gran exposición sobre el Señor de Sipán

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ARQUEOLOGÍA El Tut-Anj-Amón americano aterriza en España

27 marzo 2012

El mayor hito de la arqueología de América, el sueño de oro del señor de Sipán, llega hoy a Cádiz con motivo de las celebraciones de su capitalidad cultural iberoamericana.

El descubrimiento de la tumba del señor de Sipán fue uno de esos sucesos que superan a la ficción de blockbuster cinematográfico: un arqueólogo llamado en mitad de la noche por las autoridades, tiroteos entre excavadores y saqueadores por el control de la zona, y finalmente un hallazgo fabuloso que supera los sueños más locos de la comunidad arqueológica local. El yacimiento ha sido comparado por algunos expertos con el de Tut-Anj-Amón en el Valle de los Reyes; ambas tumbas estaban intactas, inalteradas a lo largo de los siglos y repletas de oro.

En el caso de la fosa del señor mochica, el conjunto es realmente impresionante, una buena muestra de la orfebrería preincaica: máscaras funerarias y pectorales de oro, joyas de factura delicada, orejeras de oro y turquesa, una pesada maza-cetro de oro, un collar formado por 20 frutos del cacahuete en oro y plata, otro collar formado por 10 cuentas en forma de arañas, una corona de oro en forma de gran media luna, un protector de oro, un pectoral acompañado de estandartes de cobre dorado con las imágenes de un dios felino coronado por serpientes bicéfalas, y unos sonajeros de oro.

Una parte importante de este impresionante ajuar llega hoy a Cádiz, con motivo de las celebraciones de su capitalidad cultural iberoamericana (en el bicentenario de la Constitución de 1812). Permanecerá en la Casa de Iberoamérica todo el verano, hasta el 10 de septiembre. Aunque algunas de estas piezas ya se habían podido ver en nuestro país -en 2006, en el MARQ de Alicante- esta muestra exhibe por primera vez muchos hallazgos nuevos,  así como todas las piezas procedentes de la tumba de la Señora de Cao.

María del Carmen Marín relata el descubrimiento y explotación del yacimiento en nuestro número de enero: “En abril de 1987, las autoridades del pueblo de Sipán, a 35 km de Chiclayo, en el departamento de Lambayeque de Perú, encargaron al arqueólogoWalter Alva el saneamiento y restauración de Huaca Rajada, una antigua plataforma de adobe perteneciente a la culturamoche omochica, cuyas estructuras corrían peligro de ser saqueadas. Cuando el doctor Alva y su equipo de arqueólogos y estudiantes del Museo Bruning comenzaron a trabajar en la plataforma ubicada delante de dos pirámides truncadas, también de adobe y que ahora parecían montañas de barro, no imaginaban las dimensiones que alcanzaría aquel proyecto.

Sus primeros trabajos se centraron en la limpieza de la tumba profanada, en la que pronto aparecieron nada menos que 1.300 vasijas, sin duda, ofrendas rituales. Este número asombroso de hallazgos les hizo sospechar que estaban en presencia de una tumba milenaria de gran importancia: a partir de entonces, la misión de salvamento se transformó en una gran excavación. Una sospecha que se haría realidad cuando, a mediados de 1988, tras intensos meses de trabajo, el doctor Alva daba a conocer sus resultados: había aparecido, intacto, el enterramiento de un monarca mochica con gran cantidad de objetos de oro, plata y piedras preciosas de incalculable valor (…)” (puedes leer el artículo completo en el número de enero de La Aventura de la Historia en Orbyt)